Cheese es una semilla de marihuana feminizada que despegó con un éxito rotundo en el Reino Unido y que, poco a poco, conquistó al público del sector en el resto del mundo con unos rasgos únicos entre los que destacan su aroma y su sabor a queso curado.
Hoy en día es una verdadera estrella del cannabis que todo el mundo conoce, y en Holanda es una de las variedades más solicitada en los coffee shops por los turistas cannábicos.
En Dinafem Seeds, para crearla, nuestros breeders decidieron cruzar dos genéticas con un pedigrí que corta la respiración: Old Skunk #1, con cualidades aromáticas y gustativas muy particulares, y Afghani #1. Y nos hemos quedado más que contentos con este híbrido Indica que entraña cualidades fieles a sus orígenes, que arrasa por donde pasa, y que todo el mundo identifica como un gran clásico Old school.
Cheese desarrolla plantas de marihuana con una estructura tupida y ramificada, con hojas finas y alargadas. Su aspecto es siempre radiante, y se muestra como una gran diosa en el jardín; con cogollos alargados y pegajosos, de gran tamaño, con un color verde oscuro único y peculiar.
Cheese ofrece buenos rendimientos; hasta 525 g/m2 en interior y 1000 g/planta en exterior. En el momento de la cosecha el olor es prácticamente “insoportable”, lo envuelve todo y casi te anestesia, y la cantidad de cogollos y de resina es tal que hay para dar y regalar.
Cheese es una de las variedades de marihuana con el aroma y el sabor más característicos: un aroma y un sabor intensos y duraderos a queso curado que desde la primera bocanada crean maravillosas sensaciones. Allí por donde pasa, el ambiente queda impregnado con intensas notas a Skunk, a queso viejo y a incienso, y todo el que la cata es seducido al instante.
Cheese produce un agradable efecto, potente y equilibrado, que comienza con una placentera estimulación cerebral y finaliza con una tranquila sensación de relajación física. Con un nivel de THC más que respetable, entre un 9 y un 14%, se convierte en una variedad de cannabis perfecta para relajarse. ¡No podrás olvidarla!
Cheese crece en poco tiempo (50-60 días) y con mucha fuerza, así que cultivarla es tarea fácil en manos de cualquier cannabicultor. En interior admite cualquier método de cultivo pero su homogeneidad ofrece grandes posibilidades con el método SCROG. En exterior crece muy bien en climas templados/mediterráneos o en invernadero, y a principios/mediados de octubre la cosecha estará lista para su recogida. Es importante tener en cuenta que es casi obligatorio el uso de filtros antiolor si queremos disimular su penetrante y envolvente aroma, y no queremos llamar la atención de vecinos indiscretos.
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