Kalashnikova

Kalashnikova

Juntar dos variedades legendarias no siempre es garantía de que el resultado va a tener el potencial de convertirse en una leyenda, pero cuando Greenhouse Seeds cruzó la AK-47 con la White Widow, acabaron con una planta de enormes rendimientos y una desconcertante producción de resina. La Kalashnikova será pronto famosa entre los cultivadores.

La Kalashnikova responde bien a la poda y se ramifica muy bien, lo que la convierte en la elección perfecta para el cultivo en SOG o ScrOG – pero es igual (o incluso más) de productiva en el exterior. Siempre que se le conceda un plazo razonable de periodo vegetativo, se la alimente bien y se le de suficiente luz, tiene el potencial de producir hasta 750 g/m² tras 8 semanas de floración en interiores. Cuando se cultiva al aire libre, es posible acabar con plantas portadoras de hasta 1 kg de racimos florales a finales de septiembre.

Los brotes gigantes son de forma columnar, con una parte superior casi plana y un crecimientos irregular. El color verde-lima de los brotes está casi completamente oculto detrás de una escarcha de tricomas blancos y brillantes, dando a los brotes el aspecto de haber sido recubiertos de azúcar. Aparte de la gran cantidad de brotes y el aspecto de estos, estamos hablando de una hierba muy potente. El 15% del botín bien curado es THC. Cuando la fumes deberás estar preparado para experimentar una sensación embriagadora y al mismo tiempo adormecedora del cuerpo.